Ciencia para tocar
Tras dos intensos días de Naukas llegó el momento de los más jóvenes con Naukas Kids. El Euskalduna volvió a llenarse de ciencia con cinco talleres y dos espectáculos dirigidos a los jóvenes. En una primera parte se desarrollaron talleres donde los asistentes aprendieron ciencia haciendo ciencia.
Con aforo completo, las próximas promesas de la ciencia, divididos en dos grupos de edad (3-10 y 13-16 años), pudieron experimentar, entre otros, con flotabilidad, densidad, pigmentos y huellas dactilares.
Papel y colores fueron las herramientas con las que Zientziapolis guió a los más pequeños en la creación de floridas obras mientras aprendían sobre colores, pigmentos y cromatografía.
Por su parte, Ciencia Divertida, explicó por qué flotan los barcos mientras los jóvenes hacían sus comprobaciones con globos, agua, vasos…
En el segundo bloque de talleres Zientziapolis puso a los más pequeños a experimentar con sus huellas dactilares a la vez que aprendían lo únicas que son.
Ciencia Divertida experimentó con la densidad y mostró cómo algunos objetos engañan con su densidad. Además, construyeron un densímetro de líquidos.
No acabaron aquí los talleres, el periodista científico Antonio Martínez Ron también realizó su propio taller donde respondió preguntas de lo más variopintas como qué tamaño tiene el espacio o por qué si ponemos algo sobre una nube se cae.
Después de los talleres llegó el momento de los espectáculos. También divididos por grupos de edad (8-12 y 13-17 años) hubo dos actos simultáneos. Por un lado, Big Van trajo su espectáculo científico para enseñar ciencia a los más pequeños.
En la sala contigua los asistentes tuvieron oportunidad de hacer preguntas a cinco científicos de distintas disciplinas gracias a Somos Científicos. Además pudieron valorar la mejor pregunta.
